Queridos visitantes, la intención de estas líneas es aclarar algunas cosas con respecto a la lamentable situación que nos ha tocado vivir en el día de ayer, viernes 20 de Noviembre de 2009, durante la marcha en reclamo por seguridad y una solución para el problema de la delincuencia en la Argentina, a raíz del asesinato de Renata, en Wilde.
Como organización barrial y popular, altamente comprometida con la tarea de mejorar la calidad de vida y perseguir firmemente una transformación social, nos acercamos a la comisaría 5º de Wilde con nuestra propuesta para no tener que lamentar más hechos de violencia, delincuencia y asesinatos. La nuestra no es una propuesta simple, ni mucho menos inmediata: “PAN, TRABAJO Y EDUCACION”. Con esta consigna decidimos manifestarnos los cuatro días de marchas junto al Grupo Giros. También clamamos por la “NO CRIMINALIZACION DE LA POBREZA”, como se ha estado haciendo en las marchas por algunos vecinos que pedían “control en las villas” y “mano dura”. De estas consignas se desprende que la mano dura debe ser para la gente de las villas, que no nos olvidemos que también sufren la inseguridad y la desprotección más que ningún otro ciudadano por no tener un hogar digno, una educación y una alimentación acorde, donde ni la policía, ni bomberos, ni ambulancia entran para atender a las necesidades de quien la requiera.
Nuestro Centro no tiene, ni tendrá filiación con ningún partido político. La nuestra es una lucha plural, donde independientemente de las simpatías por algún partido político, se prioriza la lucha y la transformación en el plano de lo social, lo popular, lo cultural y lo artístico. Sin embargo, en la marcha del día de ayer hubo “encargados” de confundir a la gente, con el propósito de dispersar las marchas, de enrarecer el clima y crear tensión entre los propios vecinos. Estos infiltrados se ocuparon de señalarnos, incluso de advertir de antemano que se esperaba que llegase la gente de Quebracho para politizar la protesta. Los supuestos partidarios de Quebracho éramos nosotros. No haremos un juicio de valor sobre esta agrupación y sólo diremos que jamás hemos tenido relación con ellos. Evidentemente, la desinformación funciona, dado que a los pocos minutos de haber llegado comenzamos a ser agredidos, insultados y bastardeados, con la excusa de que nuestros reclamos perseguían la politización de la marcha. Entendamos, primero que nada, que todo acto humano es un acto político.
El día anterior, Jueves, los chicos de la agrupación Azulado, agrupación de la cual formaba parte Renata, colaborando con el comedor popular de la villa Azul, fueron echados y agredidos por un grupo de “vecinos” que no compartían sus consignas: “Trabajo y Educación”, “Azul también es Wilde”.
Lamentablemente, hubo gente decidida a no querer compartir el espacio con nosotros. Tal vez nuestras propuestas resultaban demasiado comprometidas y laboriosas para ese grupo de gente que soluciona la inseguridad con más balas y más violencia. Ese grupo nos pegó a mansalva, agredió a menores y mujeres. Esa es la manera como ellos pretenden solucionar el problema de la inseguridad y la violencia: con más violencia. No se respetaron nuestras ideas y nuestro derecho a reclamar y proponer en base a nuestros ideales.
Luego de esta triste jornada, nos preguntamos, cómo es posible un mundo mejor, donde quepamos todos, sin odios, sin rencores, sin violencia. Con la discusión crítica y organizada como base para la construcción de un futuro inclusivo y ecuánime, con igualdad de oportunidades y de derechos. Los derechos no son, como se escucha tantas veces, para los delincuentes. No desmitificamos la delincuencia, ni defendemos a los criminales. Creemos que la así como la pobreza, la delincuencia, la drogodependencia y el crimen se fue instalando lentamente en nuestra sociedad, de igual forma se ira. No es una tarea sencilla, ni mucho menos rápida. La violencia sólo genera más violencia; quien pide la muerte, está pidiendo la desaparición de una vida y es la vida el derecho humano por excelencia. Si una vida vale tan poco, el resto de las vidas valdrán lo mismo: NADA.
SOÑAMOS CON UN MUNDO SIN VIOLENCIA. SOÑAMOS CON LA PAZ, EL AMOR Y LA IGUALDAD. SOÑAMOS CON UN MUNDO SIN EXCLUIDOS.